Todos tenemos muchas cosas. Todos o casi todos tenemos teléfono móvil, televisión, ordenador… pero hay algo que todos tenemos. Problemas. De mayor o menor importancia pero lo tenemos, como tenemos teléfonos móviles u ordenadores de distinta calidad. ¿Y en que se distinguen esos problemas? Simplemente en una cosa: en la persona que los afronta. El mismo problema que puedan sufrir dos personas puede acabar de mil formas distintas según la actitud de quien se digne a resolverlo.
Hay mucha gente que huye, o huíamos de los problemas solo por el hecho de creer que por hacerlo se resolverían. En cambio, hay una minoría que ve, o vemos, cada problema como una oportunidad. Una ocasión para probarte, para ver realmente donde estas y si puedes salir de ello. Cada problema, por pequeño que sea, te debe servir para aprender algo nuevo, para no volver a tropezar con la misma piedra…
¿Pero qué problemas son realmente importantes y cuáles no? Bueno mi humilde opinión y experiencia me dice que los problemas mas duros son esos que aparecen un día cualquiera, sin mas, sin tener ni idea el día antes que al día siguiente te va a pasar algo así. Es cierto. Pero mi consejo ante esos problemas es no preocuparte, por que no sirve de nada…
En definitiva yo no te digo lo que tienes que hacer ante una situación como esta, eso es muy personal. Solo expongo como lo hago y su repercusión. Solo tomate por un día tus problemas como una oportunidad, y afróntalos con una sonrisa, aunque a veces sea tan difícil…