– Din Don… ¡Ultimo aviso para viajeros!
– Creo que ese es mi tren si… ¿verdad?
Cuando montó en el tren, se acomodó en su asiento, y se puso a mirar el paisaje con su música favorita en los oídos se dio cuenta de que iba a tener demasiado tiempo para reflexionar. Cuando todo acaba antes de lo que debería te da tiempo a pensar mucho mas, igual que cuando estas tanto tiempo sentado por que no te dejan hacer lo que mas te gusta, por que el no te deja hacer lo que mas te gusta. A pensar en que había hecho tantas cosas mal, y no había aprendido apenas de esos errores que se había llegado a convertir en una persona apta para meter la pata, un tío que hace bien las cosas malas por así decirlo. No sabia si cambiar o no, tampoco estaba tan mal después de todo. Todo acaba antes de lo que debería, y en cierto modo es como si muriera por un rato… Lo peor de todo es que al día siguiente tiene que pedir perdón a aquel amigo que no llegó a ver, o a ella por ser un completo idiota después de prometerla algo tan sencillo como ir verla pero no llegar a hacerlo…
– A ti que nunca te dije lo que realmente sentía… A ti que nunca te acompañaba a la parada del autobús… A ti que nunca te hice sentir especial…A ti que nunca te dije que el domingo tenia sentido por ti… A ti que no te escuchaba cuando me decías lo bonitos que eran mis ojos… No saber valorar. Eran cosas que iba acumulando, cosas que hacia mal y que seguía haciéndolas mal, como si nunca quisiera hacerse mayor. Ese que cada domingo prometía que no volvería a beber nunca mas, y al siguiente sábado por la noche acaba subido en una barra con una botella en la mano mientras animaba a la parroquia.
Lo peor de todo es que estaba aprendiendo a resignarse, o tal vez no, pero si algo parecido. Tampoco podía luchar contra los elementos cada día y en cada momento, intentando salvar a la princesa del dragón. Aunque llego a ser príncipe, pasando por rana, lo ultimo que tenia que hacer era bajarse de aquel vagón, el vagón de los elegidos al que llego sin hacer ruido… No puedes llegar a la cima y decir: – ¡Aiba! Asíque esto es así… No se… Me esperaba otra cosa… Me esperaba que todo fuera más sencillo la verdad… Desde luego no iba a seguir luchando por algo en lo que había dejado de creer, aunque eso llevara consigo tantas y tantas cosas… y eso, ¿Es bajarse del tren o hacerse mayor? Todo se ira como se va el humo de aquel tren… Pero la vía seguirá estando ahí…